Filipinas, las perlas del Sur

Comienza la aventura. El aeropuerto se convierte en la antesala de un viaje que promete abrir horizontes. Dejamos atrás la rutina para embarcarnos hacia Manila, la puerta de entrada a un archipiélago que late entre océanos y volcanes. Noche en vuelo, con la emoción de lo que está por descubrirse.

Llegada al Aeropuerto Ninoy Aquino. Traslado al hotel en Intramuros. Manila nos recibe con su caos vibrante y su historia profunda. Por la tarde, cruzamos las murallas de Intramuros, la histórica ciudad amurallada española, donde las piedras guardan el eco de galeones y rezos. Caminamos entre patios empedrados y balcones de madera tallada, descubriendo el Fuerte Santiago, la Catedral, la solemnidad barroca de Iglesia de la Inmaculada Concepción de San Agustín (Patrimonio de la Humanidad) y la elegancia colonial de Casa Manila, mientras el sol tiñe de oro las fachadas que han visto pasar imperios y revoluciones.

Desayuno en el hotel. Hoy Manila se revela como un museo vivo. El Museo Nacional nos habla de los orígenes, mientras el Ayala deslumbra con su colección de oro ancestral, testimonio de culturas que florecieron mucho antes de la llegada europea. Cada vitrina es una ventana a un pasado que sigue latiendo en la memoria filipina. Almuerzo con sabores locales que nos acercan a la esencia del archipiélago.

Desayuno en el hotel. Traslado al Aeropuerto Doméstico de Manila para vuelo a Laoag. Volamos hacia el norte, donde la historia se escribe en piedra y adobe. En Paoay, la iglesia de San Agustín se alza como un poema barroco que desafía terremotos y siglos, siendo Ilocos Norte Patrimonio de la Humanidad. Más tarde, Vigan nos recibe con calles adoquinadas y casas ancestrales que parecen detenidas en el tiempo, pasear por esta ciudad fundada en el siglo XIV y Patrimonio de la Humanidad es caminar por un capítulo intacto de la historia colonial en Asia. Su arquitectura refleja influencias culturales de Filipinas, China y Europa, siendo la ciudad colonial mejor conservada de Asia. Almuerzo incluido. Alojamiento en Vigan.

Desayuno en el hotel. La mañana comienza con el sonido de los cascos sobre el adoquín: un recorrido en calesa (carruaje tirado por caballos) nos lleva por las arterias coloniales de Vigan, entre tiendas de antigüedades y talleres donde el barro se convierte en burnay. Visita al museo, tiendas de antigüedades y fábrica de burnay (jarros). Continuación hacia Sagada, donde según el clima, visitaremos las antiguas cuevas funerarias donde se encuentran restos momificados de los ancestros locales. Almuerzo en ruta. Alojamiento en Sagada.

Desayuno en el hotel. El día nos conduce a Banaue, donde las montañas se visten de verde en terrazas que parecen esculpidas por dioses pacientes, realizaremos una parada en el Museo de Bontoc, fundado por una hermana belga, que alberga una variada colección de artefactos y fotos auténticas de las tribus. En Banaue, a bordo de un jeepney local, visita a la Aldea Banga-an, un poblado tradicional enclavado en un valle panorámico de terrazas. Caminata de 20 minutos por un sendero descendente para conocer la vida cotidiana de los Ifugaos. Continuación hacia el mirador para contemplar las Terrazas de Arroz, mientras las nubes pasan sobre o bajo ti, una experiencia inolvidable. Traslado a Cauayan. Almuerzo en ruta. Alojamiento.

Desayuno en el hotel. Traslado al Aeropuerto de Cauayan para vuelo a Manila y conexión a Puerto Princesa. Hoy cambiamos montañas por mar. Volamos hacia Palawan, la joya verde del archipiélago. Puerto Princesa nos espera con su calma tropical, preludio de uno de los paisajes más asombrosos del planeta. Llegada al Aeropuerto, encuentro con el guía y traslado al hotel. Alojamiento.

Desayuno en el hotel. Nos adentramos en la penumbra líquida del Parque Nacional del Río Subterráneo. Paseo en bote de remos por el asombroso “Río Subterráneo”, reconocido como una de las 7 Maravillas de la Naturaleza. Admira las increíbles formaciones rocosas, con estalactitas brillantes y columnas que emergen del agua. La cueva es una de las redes subterráneas más largas y fascinantes del mundo. Almuerzo en las cercanías. Regreso al hotel. Alojamiento en Puerto Princesa.

Desayuno en el hotel. Traslado al Aeropuerto PPS para vuelo a Cebu. Llegada al Aeropuerto de Mactan. El viaje continúa hacia Bohol, isla de colinas y leyendas, donde nos alojaremos tras el ferry de aproximadamente 2 horas de trayecto. Cena y alojamiento.

Desayuno en el hotel. Visita a lugares históricos como el marcador del pacto de sangre, iglesia de Baclayon y paso por el bosque artificial de caoba. Continuación hacia las fabulosas Colinas de Chocolate, con parada para ver al diminuto “tarsero”, el primate más pequeño del mundo. Crucero por los ríos Loay/Loboc en bote motorizado, almuerzo a bordo, un paisaje realmente relajante. Regreso al hotel. Alojamiento.

Un día para dejarse llevar por la cadencia del mar. Las playas de Panglao son un lienzo de arena blanca y aguas turquesa donde el tiempo parece detenerse. Ideal para quienes buscan silencio, sol y horizontes infinitos.

Desayuno en el hotel. egresamos al corazón de Cebu, donde la historia y el mar se dan la mano. Traslado a Cebu en bote motorizado (2 horas). El hotel frente a la playa nos invita a disfrutar de la calma antes de nuevas aventuras en Argao. Alojamiento y tiempo libre para disfrutar de las instalaciones del hotel.

Desayuno en el hotel. Excursión a Moalboal, en bote tradicional hacia Isla Pescador. Hoy el océano se convierte en escenario de un espectáculo único: miles de sardinas dibujan constelaciones bajo el agua, moviéndose en perfecta sincronía. Entre ellas, las tortugas marinas nos recuerdan la armonía de este ecosistema. Snorkel, sol y almuerzo frente al mar completan una jornada que quedará grabada en la memoria. Regreso al hotel y alojamiento.

Desayuno en el hotel. Excursión a la ciudad de Cebu, considerada la versión más pequeña de Manila, con encanto histórico y playas cercanas. Visitaremos el Fuerte San Pedro, la Cruz de Magallanes (sitio de la primera misa en 1521), la Basílica del Santo Niño, el Monumento del Patrimonio y la Casa Antigua Yap-San Diego; lugares donde se cruzan las rutas de navegantes y las raíces de la fe. Entre monumentos y casas antiguas, se advierte la esencia mestiza de esta ciudad que fue puerta de entrada al archipiélago. Traslado al hotel en Mactan y alojamiento.

Desayuno en el hotel. Últimas horas para saborear el ambiente tropical antes del traslado al aeropuerto internacional para embarcar en vuelo de regreso en conexión a España.

Llegada.